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Por qué es necesario que haya una contratación abierta de las vacunas contra la COVID-19

CC BY NC ND 2.0

La distribución de la vacuna contra la COVID-19, una vez más, ha puesto a la contratación pública en primer plano. A continuación se enumeran ocho motivos por los cuales la adquisición de vacunas —desde el acuerdo de compra con el fabricante hasta la distribución con cadena de frío de las dosis, pasando por la provisión de agujas y viales para la aplicación— debería llevarse a cabo con apertura:

  1. La contratación abierta fortalecerá la confianza pública en los programas de vacunación pública

Mucho tiempo antes de la pandemia de COVID-19, la confianza pública en la ciencia que respalda las vacunas se encontraba ya bajo la amenaza de teorías conspirativas y saberes pseudocientíficos. Cuando no se cuenta con datos concretos, los acuerdos que carecen de transparencia generan un vacío de información y veracidad que se ofrece como un terreno fértil para la conspiración y todo tipo de insinuaciones. Cuantas más oportunidades tengamos de compartir información y establecer una única verdad clara respecto de cómo se contratan, distribuyen y aplican las vacunas, mayores serán nuestras posibilidades de construir la confianza pública que necesitamos para instrumentar un programa de vacunación global exitoso. 

  1. Los fondos públicos no deberían gastarse en secreto

Los contratos de vacunas contra la COVID-19 han recibido un fuerte aporte de fondos públicos —más de USD 9000 millones de los gobiernos y más de USD 2000 millones de entidades benéficas—, e incluso a las vacunas que han recibido financiación privada solo obtendrán un retorno sobre esa inversión mediante compras gubernamentales de gran envergadura. Los fondos públicos no deberían gastarse en secreto. Existe un interés público claro y demostrado en la adquisición, la distribución y la disponibilidad de vacunas. Es una cuestión de interés público conocer el nombre del contratista y el fabricante, el número total de vacunas contratadas, el valor del contrato y el cronograma de entregas.

Hace dos años, un grupo de representantes de la industria (incluido el sector de productos farmacéuticos), los gobiernos y la sociedad civil crearon un conjunto de principios de consenso con respecto a los secretos comerciales y la publicación de los contratos gubernamentales. Uno de esos principios fue que las decisiones sobre censura de datos y publicación debían tomarse teniendo en cuenta el interés público. El único motivo para censurar información de un contrato es que esto redunde en algún beneficio para el público, y no que favorezca a alguna compañía. Nuestras preguntas frecuentes sobre COVID-19, contratos y confidencialidad responden muchas preguntas comunes sobre cómo lograr un equilibrio entre los intereses comerciales y los públicos.

  1. En los países de ingresos bajos y medios se necesita claridad respecto de si sus contratos son justos

En los países en desarrollo existe una sensación cada vez mayor de enojo y frustración por la falta de equidad en la contratación y distribución de vacunas. Se ha sostenido que el carácter secreto de los contratos permite que las compañías farmacéuticas ofrezcan diferentes niveles de precios, con valores más bajos para los países más pobres. Sin embargo, hasta el momento, los países ricos han recibido un trato prioritario en la distribución de las vacunas, y tal como lo señala Charles Kenny, existe escasa evidencia de que los países pobres hayan recibido el beneficio de un precio más bajo. En lo que respecta a la COVID-19, la información con que efectivamente contamos indica que los países pobres suelen pagar precios más altos. Kenny señala: “La Comisión Europea está pagando $ 2,19 por dosis por la vacuna de Astra Zeneca, mientras que Filipinas paga $ 5,00, y Sudáfrica paga $ 5,25. La Unión Africana está pagando $ 10 por la vacuna de Janssen, mientras que los países de Europa pagan $ 8,50. Eso puede estar relacionado con el financiamiento anticipado que los países ricos han aportado para el desarrollo de las vacunas, pero si los contratos no se publican, no podemos estar seguros de que ese sea el motivo”.

  1. Los acuerdos abiertos son más beneficiosos para los ciudadanos y para los gobiernos

Las contrataciones que se instrumentan de manera transparente desde el principio cambian las condiciones de juego para los gobiernos y para los ciudadanos. Saber que la información sobre los acuerdos, la entrega y la aplicación será de conocimiento público reduce el riesgo de que se tomen decisiones y se adopten disposiciones que resulten contrarias al interés público. Estos contratos contienen información sobre la fabricación basada en el “mejor esfuerzo”, los derechos de intervención (la capacidad del gobierno para intervenir en representación de los ciudadanos si una compañía deja de ofrecer la vacuna conforme a términos y tarifas razonables), responsabilidad, cronogramas de entrega, acuerdos de licencias para ampliar la fabricación a escala y otros puntos. 

En el caso de muchos países de ingresos bajos y medios, es posible que los acuerdos para la compra de vacunas se realicen a través de intermediarios, y es de vital importancia saber quién es la contraparte y cuáles son los términos que podrían exigir estos intermediarios. La capacidad para que el gobierno en general y la sociedad civil opongan críticas a los acuerdos para asegurarse de que estos se mejoren constantemente forma parte de la responsabilidad pública que esperamos de cualquier democracia eficaz, y contribuye a que los acuerdos alcancen la mayor solidez posible.

  1. La contratación abierta permite compartir información de manera eficiente para optimizar las cadenas de suministro

Los esfuerzos de contratación por parte de los gobiernos han enfrentado, en reiteradas oportunidades, dificultades relacionadas con la cadena de suministro. Recientemente hemos recibido, a través de los medios de comunicación, noticias sobre las demoras en la entrega de vacunas de AstraZeneca en Europa. Los datos abiertos sobre los contratos, cronogramas de entrega, acuerdos de suministro y otros aspectos del programa de vacunación permiten que diferentes áreas del gobierno establezcan canales de comunicación para identificar problemas antes de que se agraven y salgan de control. Tener datos compartidos más abiertos significa contar con tiempos de respuesta más breves y con mayor eficacia ante las fluctuaciones del suministro. La experiencia de Ucrania muestra cómo la contratación abierta permitió monitorear, en tiempo real, los precios, el suministro y los riesgos.

  1. El oligopolio del mercado y la falta de divulgación de detalles de los contratos deja a las instituciones en una situación de mayor vulnerabilidad a la corrupción y las expone a tener que pagar precios injustos

La OMS informó que el 80 % de las ventas de vacunas corresponden a solo cinco grandes corporaciones multinacionales, que surgieron como resultado de fusiones y adquisiciones que tuvieron lugar en las últimas décadas. Señaló: “Muchos de los mercados de vacunas individuales son monopolios u oligopolios, sea por producto o por presentación”. En este tipo de mercado, el equilibrio entre la oferta y la demanda debe monitorearse de cerca, y esto lleva a la OMS a promover la “gestión y comunicación constantes entre los actores del mercado” para garantizar un suministro suficiente de vacunas. Sin un proceso de contratación abierta, es sumamente difícil para el gobierno y el público saber si la contratación en estas condiciones de tensión en el mercado se está administrando a favor de sus intereses y con la mayor eficacia posible. 

  1. Con mayor transparencia, se evitarán riesgos para la reputación de los fabricantes de vacunas

El panorama global de las empresas está lleno de grandes marcas que se comprometen con iniciativas de responsabilidad social corporativa en un intento por mejorar su reputación como líderes de negocios. Si bien las acciones benéficas de Moderna para plantar especies resistentes a las plagas, o la iniciativa de Pfizer de donar el tratamiento contra el tracoma a comunidades de bajos ingresos son sumamente meritorios, su impacto sobre la reputación de las compañías farmacéuticas se verá eclipsado por el único hecho por el cual la población mundial las recordará: por el modo en que respondieron durante la peor pandemia de la que se tenga memoria. Los fabricantes de vacunas tienen una oportunidad única de posicionarse en un lugar heroico por sus esfuerzos para entregar vacunas en tiempo récord utilizando sistemas de innovación sin precedentes en pos del bien mayor. ¿Por qué desmerecer estos logros con una actitud de secretismo que solo sirve para alentar el escepticismo hacia las vacunas y sembrar incluso más desconfianza respecto de las motivaciones de las grandes empresas?

  1. Desarrollar las actividades comerciales de la manera habitual no resulta suficiente en tiempos sin precedentes

A menudo escuchamos que el secretismo y la eliminación de elementos claves de los contratos de vacunas y el proceso de contratación forman parte de las prácticas que se implementan “desde siempre”. La negativa a cambiar y a adaptarse no es una justificación válida para una acción determinada, y resulta totalmente absurda cuando enfrentamos circunstancias y desafíos sin precedentes. Nada de lo que se está haciendo para responder a la crisis forma parte de las prácticas habituales, ni tampoco tendría por qué serlo. Y si no modificamos en este momento las prácticas instaladas, no podremos dar la mejor respuesta posible ante la crisis, y tampoco lograremos crecer y adaptarnos para poder brindar respuestas aún más contundentes a crisis futuras.La contratación abierta funciona. A lo largo de la pandemia, hemos brindado apoyo a gobiernos y a socios de la sociedad civil de todo el mundo para que trabajen en pos de mejores resultados en las contrataciones de emergencia. Ha resultado perfectamente posible comprar de manera rápida y con apertura. De hecho, ha colaborado para lograr resiliencia y coordinación, y ha ayudado a que compradores y proveedores puedan conectarse pese a verse afectados por alteraciones sin precedentes. Si desea obtener más información, consulte nuestra orientación, investigaciones y evidencias en nuestra página sobre COVID-19. Estamos elaborando una guía informativa para compradores de vacunas. Envíenos un mensaje de correo electrónico si desea que lo agreguemos a nuestra lista de correo para recibir más novedades.